Concéntrate en el mensaje principal
La clave para centrar tu comunicación es conocer el mensaje central y seguir reforzándolo a lo largo de toda la comunicación.
Un mensaje central suele constar de una frase para describir el problema, otra para la(s) idea(s) central(es) y otra para el impacto. Por ejemplo:
- Problema: La puntuación media de los estudiantes de matemáticas de la Universidad A ha disminuido en los últimos tres años.
- Discernimiento: El análisis de los datos indica que hay más estudiantes que se matriculan con un conocimiento inicial más débil de las matemáticas.
- Impacto: Mediante la organización de escuelas de verano de matemáticas, la Universidad A puede ayudar a los estudiantes a prepararse mejor para el nivel de conocimientos previsto en matemáticas.
Este ejercicio forma parte del curso
Introducción a la alfabetización en datos
Ejercicio interactivo práctico
Convierte la teoría en acción con uno de nuestros ejercicios interactivos
